Todos los lugares de Cruising Gay en México

Central Camionera Aguascalientes

Homepage Foros LUGARES Aguascalientes Aguascalientes Central Camionera Aguascalientes

Viendo 20 entradas - de la 1 a la 20 (de un total de 20)
  • Autor
    Entradas
  • #28923
    hefraperez
    Participante
    Puntos: 603

    LUGAR: Central Camionera Aguascalientes

    Conoce el lugar: Central Camionera Aguascalientes

    Tema del Lugar: Experiencias, Consultas, etc
    Central Camionera Aguascalientes

    Tema de Encuentros del Lugar:
    [Encuentros] Central Camionera Aguascalientes

    #29612
    lalo009
    Participante
    Puntos: 0

    Alguien sabe si Ya se puede volver a hacer cruising aquí??
    Lo último que supe es que estaba muy controlado el accesos por lo de covid.

    #30884
    Twink20
    Participante
    Puntos: 54

    lalo009 yo fui hace como dos semanas y me la mamaron entre tres, todo lo vi normal y con mucho movimiento en los baños.

    #33378
    lalo009
    Participante
    Puntos: 0

    El día 2 de julio fui a la central para ver si ya las cosas estaban normales como comentaban y en efecto, todo esta normal, se puede entrar sin ningún problema.

    Estado ahí aproveche y fui a los baños jeje y la vdd me la pase muy bien, sigue habiendo mucho movimiento, en el rato que estuve nos estuvimos agarrando la verga y el culo por debajo de los cubículos, esto con dos vatos diferentes.

    De rato llegaron dos vatos más y se las estuve mamando, con uno de ellos estuve fajando super rico por un rato, nos besamos rico (ya se que nos es buena idea estarse basando por la situación pero la calentura me ganó jeje) con forme nos besabamos el me agarraba el culo y me lo apretaba super rico, a demás de que también me estaba dedeando el ano, nos la mamamos, y también me dio unos buenos arimones de verga en mis nalgas.

    Lo unico que no me agrado es que estaba un wey ahí parado y no se animaba a nada solo se quedaba viendo, la neta no se para que van si no van a hacer nada, solo la cagan asiendo mas obvio los lugares y quemandolos, no dejan fajar a gusto a los que si vamos en busca de algo.

    #38066
    Pasivolentes
    Participante
    Puntos: 36

    Yo lo que supe de estos últimos días es que está dando pitazo a los estatales, prefiero ir a los de constitución

    #39058
    Kerberos10
    Participante
    Puntos: 194

    He optado por ir a los baños que están en el área de andenes. Me gustan porque están muy solos y cuando llega alguien que jala se puede fajar y mamar muy a gusto. A esos baños llegan varios choferes de los autobuses y me ha tocado ver que algunos usan tanga y uno que otro es exhibicionista: estando yo lavándome las manos uno se puso a mi lado y se bajó el pantalón con la intención de fajarse la camisa. Me pareció que se los bajó demasiado pues le pude ver perfectamente el bulto en su calzón azul.

    Lo malo es que últimamente un joto bastante horrible que hace la limpieza entra y se mete a los cubículos sin hacer ruido. No te dice nada pero de verdad es muy incómodo tenerlo a lado como esperando a que tú le hagas alguna seña. Aunque aún se pueden hacer cosas, cada vez se vuelve más escaso y peligroso.

    #39498
    lalo009
    Participante
    Puntos: 0

    Kerberos10 por donde están esos baños del are de andenes que dices?? Jeje
    Para darme una vuelta en estos días

    #39712
    Twink20
    Participante
    Puntos: 54

    Es correcto, esos baños se prestan muchísimo, siempre están solos, yo una vez fui a fajar a los baños de 5 avenida y mejor me lleve a un chavo a los de andenes y ahí cogimos de lo lindo sin ninguna interrupción. Eso sí, la mayoría de las veces para acceder a esa area, tienes que presentar tu boleto de pasajero en los torniquetes donde está la vigilancia.

    En otra ocasión un señor que salió de un cubículo (supongo que era chofer, porque traía como uniforme) vio que me la estaba jalando en los mingitorios y de repente me echaba miradas desde los lavabos, luego hizo que salió y volvió a entrar y se dirigió a mi preguntándome si no sabia dónde había papel, pero no dejaba de verme la verga, no hizo nada y se fue, pero fue muy excitante para mi.

    #39844
    Cheveche41
    Participante
    Puntos: 13

    La hora ideal para el cruising en la central es de 5:30pm a 6:30 ya que a esa hora los de limpieza están en su hora de comer. Y de las 10:00 en adelante pues no hay horario nocturno de limpieza. Ustedes dirán.

    #49994
    hefraperez
    Participante
    Puntos: 603

    Ayer 12-ago di un tour por la ciudad para visitar sitios de faje y desahogar mis ganas. Llegué como 6:30 pm a los baños de la gasolinera de Villateresa. Aunque había gente y buscaban faje, no se pudo hacer nada porque estaba la señora del aseo merodeando y poco a poco todos se fueron. Igual yo. Noté que afuera estaban varios weyes en sus carros, estacionados, esperando a que se fuera la señora del aseo para entrar.

    De ahí me fui a unos baños donde supuestamente sí se puede. Están en la gasolinera de primer anillo esquina con calle Libertad, cerca del hospital Star Médica. NO SE PUEDE, hay una persona que cobra en la entrada y están junto a la ventanilla donde se piden facturaciones de la gasolinera. No sé si de noche la persona que cobra se vaya, pero a las 7:00 pm es imposible.

    De ahí me fui a la central camionera, tenía mucho que no iba. Ya están abiertas todas las puertas, aunque se han retirado muchos de los vendedores callejeros y se ve muy solo el lugar, había poca gente. Entré a los baños junto al puente peatonal. Había 3 personas, dos al fondo y uno en el primer cubículo. Me metí al tercer cubículo, por lo que quedé al lado del penúltimo.

    Los tres weyes buscaban faje. El del primer baño era un muchacho güero que al parecer estaba buscando tomar fotos y videos de los que fajaran (¡HDP!). El del baño del fondo al parecer era un señor mayor, sólo estaba sentado sin hacer nada y estirando los pies. El del penúltimo se veía más joven. Le empecé a hacer señas y le mostré el culo agachándome un poco junto a la taza. Me empezó a acariciar las nalgas y me buscó la verga para jalármela. Cuando le pedí que me mostrara, era algo incómodo alcanzarlo, así que le hice señas para hincarse.

    Un wey del aseo andaba cerca, así que tuvimos que agacharnos varias veces para fajar. Yo iba con muchas ganas así que desde la primera hincada se la empecé a mamar muy rico para hacerlo venir pronto. Tenía una verga delgada, morena, circuncidada, de unos 13 cm ya parada, normal. El pinche vato del primer cubículo estaba espiándonos con el celular. Le hice señas de que no tomara fotos ni video, pero al puto le valió madres y seguro que me grabó empinado mamando riata. Espero que no se vea mi cara.

    El vato duraba un buen, los circuncidados tardan más en venirse. En una de esas yo también me empiné para que me mirara mejor el culo y me dedeara, también me hinqué y me la jaló rico, pero yo me vengo pronto, así que se la seguí mamando mejor. Fue hasta que le empecé a acariciar el culo y a dedearle la entrada del ano cuando sentí que se empezaba a acalambrar y a empujarme más rico la verga, hasta que después de unas jaladas y mamadas con una mano y la boca y unas dedeadas con la otra mano, sentí que empezó a saberle salada la verga y se vino bien rico. Me pasé su verga por la boca y los labios, recibiendo su leche. Le di unas lamidotas en su glande sensible y hasta el último minuto no dejé de estimularlo hasta que se puso de pie.

    Tuve que limpiar su leche del suelo. Hace un chingo que no olía semen ajeno. me limpié las manos llenas de leche y ahora yo me la jalé hasta venirme en la taza. Me limpié, el wey se fue a lavar las manos. Esperé a que saliera. En eso llegó un wey de pants negro que se metió al primer cubículo, pero de rato salió y se quedó en los lavabos. Era un chavo delgado, fitness, guapo. Se notaba que iba a buscar faje porque no se quitaba del lavabo. Se me antojó el wey pero yo ya iba deslechado y quería irme. Me lavé las manos y me fui.

    Por cierto, los rehiletes de salida ya no suenan, por lo que es difícil saber desde los cubículos cuando alguien se fue de los baños, y es más fácil que te cachen en la movida así, yo tuve que salirme del cubículo varias veces para ver que no hubiera nadie. Tomen sus precauciones.

    #57964
    hefraperez
    Participante
    Puntos: 603

    Hoy 10-sep fui a la central camionera, a eso de las 3 de la tarde, después de que no hubo nada interesante en los baños de la gas de Villateresa. Ya hay más gente esperando camión y turistas circulando por toda la central. Me metí a los baños junto a 5a Avenida y estuvieron totalmente solos por al menos 30 minutos. Perfecto para hacer de todo, pero nadie entraba. Yo estaba en el cubículo del fondo. Los pocos que llegaban se metían a los primeros cubículos, tomando su distancia, pero en su mayoría eran ancianos y solo fueron a sus necesidades.

    Ya al final, casi por irme, noté que en los lavabos había alguien. Era un hombre como de 40 años, alto, delgado y de muy buen ver. Estaba parado, viendo su celular y ni orinaba ni entraba a los baños. Me lavé las manos y regresé al cubículo del fondo, para ver si la captaba y se acercaba a fajar, pero no lo hizo. Me desesperé y salí, rodeé la central para ir a los otros baños.

    Para mi sorpresa los otros, junto al puente peatonal, estaban llenos, y eran casi puros turistas. Noté que de repente se agachaban para ver quiénes estábamos esperando entrar, pero ninguno de ellos hacía nada ni se la jalaba al de al lado. Era desesperante ver que no hacían nada ni se retiraban para dejar a otros hacer.

    Siguieron llegando más personas, pero sólo se desocupó el primer cubículo (nadie quiere entrar a ese cuando va a buscar faje). Para mi sorpresa llegó un hombre como de 30 años, moreno, con uniforme de una marca de agua purificada, pero parecía más como de ventas, iba de camisa blanca y pantalón azul de vestir, ajustado. Se le veían unas nalguitas bien ricas. En eso entró también el wey atractivo que estaba en los otros baños y los dos se pusieron a platicar. Ya se conocían y al parecer iban a buscar faje, pero como estaba todo lleno nadie se animaba a nada.

    Me desesperé por no poder probar a estos dos machos, me fui a lavar las manos y el que estaba en el baño anterior me dijo:
    -Ya está desocupado ese baño, adelante-
    -Es que se está tirando el agua de la taza- le dije. Y en realidad así era, estaba todo el piso mojado en ese cubículo, no quise entrar por eso y mejor me fui.

    Ojalá estos días pueda ir a sacar la leche, porque hoy no tuve suerte.

    #67326
    hefraperez
    Participante
    Puntos: 603

    El pasado lunes 19-oct pasé a la central camionera a eso de la 1 de la tarde. Sigue habiendo mucho movimiento. Entré primero al baño que está junto al puente peatonal. Estaban llenos y nadie hacía nada, todos sentados en los cubículos esperando su momento para buscar faje con el de al lado.

    Por suerte me tocó el baño del fondo, pero el tipo que estaba a un lado no era muy atractivo, ahí siempre hay señores y choferes de los camiones en la mañana. El de al lado parecía chofer, por su pantalón y zapatos de vestir. Por cierto, calzaba grande, como de del 29 o más grande. Después de un rato le hice señas para jalársela. Yo primero me agaché y le enseñé el culo. Buscó mi verga y me la jaló, pero como no soy vergón, me la soltó. Luego él se agachó y le pude ver sus huevos y la verga. No tenía la verga grande pero un poco más gruesa que la mía. Se la jalé, pero también le colgaba la panzota, era un señor muy gordo, así que no me excitó, pero el chiste era provocar morbo y se la jalé un rato.

    Nos separamos y al agacharme pude ver que había muchos weyes curiosos, agachándose también a ver qué veían. Se acercaron dos tipos a espiar por entre la puerta de los cubículos y luego se regresaron a los mingitorios. Me puse de pie con la verga de fuera para que uno de ellos me viera y se acercara. Cuando abrí la puerta vi a dos tipos chacales jalándose las vergas el uno al otro ahí en la bardita donde antes ponían el despachador de papel de baño. Me vieron y le siguieron, pero como no me había motivado este señor gordo, mejor me salí y me pasé a los otros baños.

    También estaban llenos esos baños y se notaba la sombra de los weyes que estiraban la mano debajo de los cubículos para jalársela al de al lado. Justo a los 2 minutos que entré a esos baños, entró de nuevo alguien que reconocí por los zapatos y el pantalón. Era el señor gordo al que se la jalé. Como no me había agradado, fingí que no lo conocía y no lo volteé a ver.

    En esos baños me tocó entrar al de en medio y me tocó que me la jalaran y me dedearan rico el culo, pero la mayoría son señores de rancho o ya maduros y no saben hacerlo con cuidado, van con las manos sucias o con las uñas largas y lastiman.

    De rato, un wey se le hincó al que estaba a mi derecha para ofrecerle verga, pero el vato no se animó. Entonces salió el chavo que se hincó y se acercó a mi cubículo. Le abrí, era un chavito como de unos 19 o 20 años, un poco afeminado, pero se había visto muy rico hincado con su pitote. Le ofrecí mi verga, pero al parecer no le agradó por el tamaño y se fue.

    Ya me tenía que ir, así que me la tuve que jalar hasta deslecharme, me limpié y se quedaron los vatos cachondos a seguirle.

    #68389
    CDMX_33
    Participante
    Puntos: 121

    Estaré el viernes como a las 11pm en la central por si se animan xD

    #102435
    hefraperez
    Participante
    Puntos: 603

    El miércoles 07-abr-21 fui nuevamente a los baños de Villateresa a eso de las 7 pm, porque me había quedado bien cachondo con un encuentro que tuve un día antes con un señor maduro de ahí. Por mala suerte estaba una muchacha del aseo limpiándolos, así que entré solo a orinar y me fui. No sabía si ir al monte de Pintores Mexicanos, aún había mucha luz y hacía demasiado calor. Decidí ir a la central camionera, ya tenía muchísimo sin ir.

    Llegué como 7:30 pm allá. Entré a los de esquina con 5ª Avenida. Aún cobran 6 pesos y estaban algo solos. Únicamente 2 personas aparte de mí, y los cubículos del fondo desocupados. Me metí al último. Desde ahí me agaché para espiar a los del primero y segundo cubículo.

    El del primer cubículo era un muchacho de piernas muy blancas. Noté que buscaba faje, pero era muy tímido o no sabía dar señas. Se agachó un poco para espiar y solo alcancé a ver su pelo. Me levanté para no verlo directamente a la cara. El que estaba al lado de él era de esos que están como estatua, esperando faje, pero no hacen absolutamente nada, ni se la jalan ni espían a los demás. No sé a qué van.

    El chavo güero se salió al pasillo y noté que se agachó para ver quién más estaba en los baños y me vio. Yo estaba con el pantalón al suelo y jalándomela. Era obvio que buscaba faje. El chavo caminó despacio hacia el fondo y se metió sin hacer ruido al cubículo al lado de mí. (“¡Dame verga ya papi!”), pensé en cuanto el vato cerró su puerta.

    Yo me la seguí jalando y noté que el wey trataba de espiarme por el agujerito, pero sin pegar su cara a la división, para no verse tan obvio. Yo en chinga le hice señas con la mano para que me dejara jalársela. El wey entendió, pero como que no sabía de qué manera hacerlo. Entonces le hice señas con la mano, hincando mis dedos en el piso, para que él se hincara también.

    Así lo hizo, pero con mucha dificultad. Tenía piernas delgadas y largas, muy blancas y trató de hincarse con una sola rodilla al piso, para no ser tan obvio. El baño estaba prácticamente solo, a excepción del otro wey del segundo cubículo que no hacía nada. Yo sí me hinqué a mis anchas y ambos nos mostramos nuestras piernas güeras y nuestras vergas. Él tenía una verga larga, blanca, sin circuncidar. Delgada pero cabezona, como tipo palanca de velocidades.

    En cuanto tuvimos nuestras vergas frente a frente, nos las empezamos a jalar el uno al otro. Este vato me la jaló con fuerza, como que tenía una forma brusca de jalarla. Yo se la jalé con suavidad para no estirarle tanto el prepucio y no lastimarlo.

    La neta si me la seguía jalando así de fuerte me iba a deslechar pronto, así que mejor me separé. Me agaché más y le di una chupada. Su verga estaba limpia, pero tenía un sabor amargo, muy amargo. No se si fumaba o si sería su jabón o loción. Se la seguí chupando y el wey acercaba lo más que podía su pelvis hacia mí. Quería ese pito largo y blanco más a fondo, pero no podía agacharme más sin hacer muchas contorsiones, así que con la mano le indiqué que saliera y se metiera a mi cubículo.

    La excitación le había quitado lo tímido al chavo, así que a los pocos segundos se subió el pantalón y salió, tratando de no hacer ruido. Le abrí la puerta y lo vi. Era un chavo como de unos 25 años, delgado, blanco y muy guapo. Era alto, como de 1.80 m.

    Entró a mi cubículo, se desabrochó su cinto y volvió a sacarse su verga. Yo estaba sentado en la taza y a esa altura se la pude mamar perfectamente. Me la metió a fondo y yo se la seguí mamando con rapidez y lo mejor que pude, mientras yo también me la jalaba a la misma velocidad que se la mamaba.

    Sonó la puerta de la entrada. Nos pusimos de nervios. Lo más lógico era que el chavo se saliera y esperara. Pero me sorprendió que en vez de eso se quedó adentro, cerró la puerta con el pasador y se pegó más hacia mí, para que no pudieran vernos y al mismo tiempo darme verga más a fondo. Yo me excité muchísimo y me la empecé a jalar con mucha prisa, hasta venirme en la taza, sin dejar de mamársela.

    -Ya me voy a venir… – me dijo en voz baja. O era sacarme su verga de la boca y que se viniera en mi cara y mi ropa, o que se viniera en mi boca. Pasó lo segundo, después de unos instantes sentí su verga lanzar unos chorros calientes en mi paladar, mientras yo se la seguía mamando, hasta sentir que su verga dejó de aventar chorros y quedarse quieta dentro de mi boca.

    Al terminar, me saqué su verga de la boca con cuidado, para no tirar su leche sobre mí. El chavo salió deprisa y en cuanto se fue escupí su leche en la taza, me limpié y le bajé al baño. Yo también tenía mi verga ya bien babosa después de haberme venido y me limpié. Salí a lavarme las manos, la cara y la boca. En ese ratito que estuve aseándome, llegaron vatos bien sabrosos a orinar, pero se notaba que también les gustaba el faje. Yo ya tenía que irme, así que no me quedé más tiempo.

    Aprovechen esos baños, nuevamente se prestan para fajes y cachondería, todo muy rico y con discreción.

    #104645
    hefraperez
    Participante
    Puntos: 603

    Hoy 19-abr-21 fui a los baños de la central camionera en la tarde, como a las 5 pm. Entré a los que están junto al puente peatonal y estaban más o menos vacíos. Sólo un wey en el segundo baño y otro en el penúltimo. Me metí al último baño y de inmediato sentí la vibra del de al lado que me estaba espiando.

    En cuanto me bajé el pantalón, no pasaron ni 10 segundos y me agaché a un lado de la taza, para enseñarle el culito al de al lado. De inmediato pasó la mano y buscó mi verga para masturbarme. Yo no la tengo grande, el wey tenía manos anchas y me dio unos buenos jalones. Luego me separé y le enseñé la mano para que me diera su verga a jalar.

    Me agaché un poco y vi que era un wey gordito. Tal vez más de lo que se me hace aceptable, como talla 42. Ni modo, mínimo por el morbo. Se agachó y le agarré su verga. Una verga gordísima. Yo tengo manos chiquitas y parecía como si fuera una manita de muñeca masturbando una vergota. Incluso no se la podía recorrer bien al jalársela y lo tuve que masturbar rápido, pero sin estirar tanto hacia atrás para no lastimarlo.

    No me agradó que sus piernas estaban muy gordas y chocaban con mi mano cuando se la jalaba. Así que me detuve y me quedé sentado, esperando a que el gordito se terminara de deslechar solo y se fuera, pero al parecer pensaba quedarse buen rato. Entró otro wey al baño de en medio, junto al gordito. Me agaché un poco para espiarlo desde el baño del fondo y noté que se agachó también.

    Siguió llegando más gente y decidí esperar en los lavabos y en la bardita para sentarse donde antes estaba el despachador de papel. No salía nadie. Del baño donde estaba yo salió otro gordito (muy gordito) que se fue al primer mingitorio y se la empezó a jalar, sin discreción. Estábamos un señor maduro como de unos 45 años (muy guapo por cierto, delgado, barbón y de ojos azules) y yo, esperando a que salieran más weyes para ocupar un cubículo aceptable.

    El gordito se le quedó viendo al señor delgado mientras se masturbaba. Me cayó mal, no era nada discreto y aparte no es por ser discriminatorio, pero estaba del asco el gordito. Ni de chiste le iba a hacer caso el señor, ni por calentura.

    Decidí irme a los baños del otro extremo de la central camionera, pero estaban peor de llenos. Incluso me puse frente a los cubículos para presionarlos y otro señor que ya le andaba del baño les tocó la puerta a todos para que salieran. Salió pura diva, torcida y señores ya viejos, los que batallan mucho para agarrar faje, y con cara de molestos, pero así como salían seguían llegando más, así que no se pudo hacer nada.

    De ahí me fui a los baños de la gasolinera de Av. Constitución, en Villateresa. Cuando entré iba saliendo un wey moreno, chacalón, de buen ver, y se sube en una caribe roja con música de antro gay (circuit) “qué perra salió este vato”, pensé. Iba con una mujer en el carro, ya ni supe si era su amiga o amigo trans.

    Entré al baño y se escuchó a alguien que se encerró en el primer cubículo, que es el único que tiene cerrojo. Tal vez estuvo fajando con el chacal que acababa de salir. El del baño era un wey bien vestido, de mocasines de esos que usan sin calcetines, pero traía puestos unos de esos calcetines muy cortos que parecen de mujer (calcetines tipo ballerina) y pantalón de vestir.

    Me fui al baño del fondo y me agaché para espiarlo un poco. Sólo estaba con su celular, así que me animé y me puse en el mingitorio al lado de él y me la empecé a jalar. Se asomó discretamente por los agujeritos para espiar y me observó. Entonces yo le hice señas con el pie y la mano para que abriera y jalárnosla, pero como que no la captó (o no quiso) y se puso a ver su celular. Por un agujero de ese cubículo pude verle la verga y noté que se dio unos jalones. Una verga color claro, sin circuncidar, de buen grosor.

    Como ya no quiso nada, fui al baño del fondo a jalármela y deslecharme porque ya me tenía que ir. Cuando terminé de limpiarme me agaché con discreción desde debajo de la puerta y vi que estaba en el mingitorio junto al primer cubículo, parado (me imagino que jalándosela).

    Salí y fui a lavarme las manos. Ni lo volteé a ver. Ya deslechado se me había ido el líbido y tenía que irme. Sí alcancé a verlo de reojo, era un wey blanco, con barba de candado recortada, alto y robusto (espaldón). Sabrozote el cabrón. Noté que se la estaba jalando y volteó a verme como en dos ocasiones, pero yo ya estaba lavándome las manos. Me las sequé y salí, lo dejé ahí solo.

    Sólo por curiosidad (para saber lo que me perdí) me fui al Oxxo y desde lejos me quedé viendo a ver a qué hora salía. Tardó varios minutos, de hecho tuve que sentarme en la banqueta afuera del Oxxo para no verme como un maniático viendo hacia afuera desde dentro del establecimiento. Salió este papazote, se subió a su coche Renault y se fue. Incluso me fui caminando con la intención de que me viera al salir de la gasolinera e integrarse a la avenida. Tal vez sí lo hizo, pero no se detuvo jajaja. No creo hallar nada romántico en estos sitios, pero sí me perdí al menos de fajarme con este cabrón tan guapo.

    #106221
    hefraperez
    Participante
    Puntos: 603

    Hoy 27 de abril fui a los baños de la central camionera, a eso de las 11 de la mañana. Entré a los que están junto a 5ª Avenida. Pensé que los iban a estar lavando y no se iba a poder hacer nada, pero estaban desocupados y muy solos.

    Justo antes de entrar, delante de mí iba un hombre afroamericano, no sé si de los hondureños y centroamericanos que andan hoy en día en cualquier esquina de la ciudad. Me dio muchísimo morbo el esperar verlo adentro y poder probar por primera vez una verga negra gigante (¡qué rico!). Por mala suerte, el rehilete de la puerta no estaba bien cerrado y cuando puso sus monedas, terminó de cerrarse y no pudo pasar.

    -Fuck the shit!, ¡Chingada madre! -, dijo el negrito. No supe si era norteamericano pero el español y las groserías le salieron muy naturales, tal vez si era hondureño. Pensé en un momento pagarle la entrada, pero se fue casi de inmediato, ¡qué mala suerte!

    Me cercioré de que el rehilete estuviera bien cerrado para que no me pasara lo mismo, puse las moneda y entré. Adentro sólo estaba un hombre en el penúltimo cubículo (“a huevo que busca faje”, pensé). Me metí al último cubículo y noté de inmediato que se puso a espiarme por el agujero de la división. No tardé mucho en acercarme y agacharme para que me tocara. Me agarró los huevos y luego buscó mi verga para empezar a masturbarme. No soy vergón, pero aún así me dio unas jaladas muy ricas.

    Cada cierto tiempo entraban algunos hombres, pero no se llenó el baño. Algunos se agachaban para ver qué hacíamos (también buscaban faje), pero no se animaban a nada. Me estuvo jalando la verga varias ocasiones este vato, haciendo pausas en lo que se iban los mirones.

    Me desesperé un poco y fui a lavarme las manos, esperando que salieran los mirones y así fue. Entonces volvimos a quedarnos el vato del penúltimo cubículo y yo, solos. Me fui directo al último baño y me le hinqué, por debajo de la división, ofreciéndole mi verga. El wey me dio unos jalones bien ricos y le hice señas para que se hincara también. Era un tipo delgado, moreno. Por el cubrebocas no supe distinguir si era mayor o joven, tendría unos 35 a 40 años.

    Ya estando hincados nos empezamos a jalar la verga mutuamente. El wey pasó su mano por debajo de mis huevos para buscar mi culito y dedearme. Me excité y me agaché más para darle una chupada a su verga. El wey venía rasurado del pito. Un pito delgado y moreno claro. Olía a jabón, como que se acababa de bañar, eso es bueno.

    Con la masturbación casi no se le paraba la verga, pero con las chupadas pude ver cómo esa verga delgadita iba creciendo y haciéndose más gruesa en mi boca. Hice varias pausas y noté cómo le creció el pito. Yo me estaba masturbando mientras se la mamaba. El wey metía más su pelvis hacia donde yo estaba, como queriendo pasarse a mi cubículo y lo escuchaba gemir en voz baja (¡qué rico y excitante!). En una pausa que hice pensé en decirle que se pasara a mi cubículo para que me diera verga estando de pie, pero seguí mamándosela y llegué al clímax, así que sólo me incorporé un poco para venirme en la taza, estando hincado y masturbando con la izquierda a este vato.

    Me vine todo y el wey ya tenía casi medio cuerpo del lado de mi cubículo, el wey estaba cachondísimo, pero a mí se me fue el líbido. Quise terminar de mamarlo hasta que se viniera, pero ya no pude y sólo le di unas palmadas en sus piernas para que se levantara. Pobre vato, me caí mal por no hacerle la chamba completa. Me limpié, me fui a lavar las manos, la cara y a enjuagar la boca. No supe si el wey se quedó donde mismo o salió, me miró por el espejo y se fue, pero ojalá haya terminado de deslecharse, para que no se quedara a medias.

    #116233
    hefraperez
    Participante
    Puntos: 603

    El 05-jul-21, después de ir a los baños de la consti, sin mucho éxito, pero visualmente satisfecho de ver a otros fajar, me fui a los baños de la central camionera. Serían las 2:30 pm más o menos. Entré a los de 5ª Avenida. Estaban todos los cubículos ocupados y 2 personas esperando en los lavabos. Se notaba que ambos buscaban faje también, pero yo tendría que esperar 3 turnos para entrar.

    En los cubículos nadie hacía nada, como siempre. Todos buscan faje, pero nadie se anima. Yo estaba sentado en la bardita donde antes ponían el papel. Un momento después salió la persona del penúltimo cubículo. Noté de reojo que se venía acomodando el paquete debajo del pantalón. Lo miré y era alguien muy conocido y con quien ya he tenido algunas experiencias. Es un señor de rancho, muy alto, como de 1.85, delgado, muy moreno, parece descendiente de afromexicanos. Vergudísmo y tiene unas patotas, calza como del 10. Recuerdo las primeras veces que me lo topé cómo se agachaba desde su cubículo y su vergota quedaba colgando para que la pudiera ver y jalársela desde mi cubículo al lado de él. En una ocasión me arrimó el pito por detrás sin meterlo, mientras me sujetaba las tetas como si fuera su vieja y nos veíamos por el espejo, como si fuera un motel.

    El señor se fue a los lavabos y le dije al primer chavo que estaba esperando que entrara al baño, pero me cedió su lugar. Pude reconocerlo, es un chavo muy lindo de Grindr, morenito, complexión media y de cara muy agradable. No es guapo, pero sí es lindo.

    Entré al baño y el que estaba en el cubículo del fondo andaba de mamón, tenía el agujerito para espiar tapado. El que estaba a mi derecha no parecía buscar faje, además tenía las piernas muy gordas. Tal vez un vato muy gordito. No me llamó la atención.

    En cuanto se fue el del fondo, entró el chavo de los lavabos e inmediatamente quitó el papel del agujerito para espiar y me empezó a ver. Así que me la empecé a jalar para que me viera. Luego le pasé la mano debajo del cubículo y me dejó tocarlo. Tenía la verga y los huevos muy flácidos, dormidos y era difícil masturbarlo desde cero. Como que le costaba trabajo excitarse. Luego él pasó su mano y me masturbó un poco. Cuando tocó mi turno ahora movió mi mano para que tocara sus nalgotas suaves y buscara su ano. Lo hallé casi de inmediato y con la punta del dedo comencé a abrírselo.

    Esperamos un momento porque entraron otros hombres y al parecer nos querían espiar. En cuanto se alejaron le volví a pasar la mano y me arrimó de nuevo su culito. Esta vez su hoyito se sentía grasoso y pude penetrarlo un poco más al fondo. Se había puesto vaselina. Saqué mi dedo y lo observé por el agujerito. Ahora él se estaba dedeando sólo. A mí se me complica hacer eso, pero él lo hacía con mucha facilidad.

    Le hice señas para que se hincara, pero él quería que me hincara yo. Luego me hizo señas con ambas manos de que quería coger (hacer un aro con sus dedos y con el dedo índice de otra mano meterlo por el aro). Volví a pasarle mi mano e hizo de nuevo el aro con sus dedos y lo pasó por mi dedo índice. Quería que me lo cogiera, pero no llevaba condón. Realmente sólo quería ir a masturbar, que me masturbaran y mamar.

    El vato de mi derecha que acababa de entrar también se agachó casi de inmediato. Era un chavo alto, de tez blanca, delgado y muy peludo, al menos de las piernas. Le hice señas para que me dejara masturbarlo, pero no me hizo caso.

    Alguien quería observarme desde afuera, lo pude ver acercarse a mi cubículo y en cuanto se alejó uno pasos abrí mi puerta un poco. Era un señor maduro, como de 55 años, moreno y de pants, chaparro. Se notaba que también buscaba faje. Cerré mi puerta.

    Entre los 3 vatos cachondos rodeándome y mis ganas de tener acción, me la jalé y me llegó el clímax, me desleché abundantemente en la taza. Me limpié y justo al bajarle al baño y abrir mi puerta, ya estaba el señor maduro justo frente a mí. Me vio y noté que traía la verga bien parada debajo de su pants, doblada a la derecha. Salí y en los lavabos había 2 personas más esperando cubículo. Yo ya me tenía que ir, me quedé con algo de ganas, pero por hoy fue suficiente. Sigue siendo buen sitio de morbo los baños de la central.

    #118037
    hefraperez
    Participante
    Puntos: 603

    La semana pasada, para ser exactos el jueves 22 de julio y el sábado 24, fui a la central camionera. El jueves sí fui con intención de buscar faje, pero aunque había varios weyes buscando lo mismo, no se dio nada. Fui a los baños del lado de 5ª Avenida, en el cubículo del fondo y me tocó ver al de al lado dándose unas jaladotas bien ricas, con su verga creciendo en su mano, pero no me dio chance de jalársela.

    El sábado fui a un asunto personal y quedé de verme con una persona ahí, pero como me avisó que se iba a tardar, decidí entrar a los baños antes de que llegara. También todos buscaban faje, pero no se animaban. Lo único rescatable fue que estando en el cubículo de en medio me topé de mi lado derecho a un wey bien patonzote, calzaba como del 10.

    Salió de su cubículo y en vez de irse a los lavabos, pasó por el pasillo, viendo disimuladamente entre los huecos de las puertas. Me miró y volvió a meterse al cubículo de la derecha. Se sentó y yo me empecé a masturbar, porque ya sabía que el wey también buscaba faje. Sin preguntar, el vato pasó su mano por debajo de la división para acariciarme la pierna. Era una manota muy morena y muy grande. Creo saber quién era.

    Ahora yo pasé mi mano para pedirle que me dejara agarrar su verga. Se agachó al lado de la taza, para enseñarme su verga colgante. Se la agarré, la tenía flácida y húmeda, no supe si acababa de orinar o estaba lubricando. Luego le agarré los huevos. Estaba bien huevudote el vato. Después de eso yo me agaché junto a la taza y el wey pasó su manota. Me recorrió mis nalgas redondas y lampiñas y se dirigió con sus dedos a mi ano. Lo encontró, lo acarició y me dio varias palmadas, como si fuera una panochita. Eso me excitó muchísimo.

    Me levanté para jalármela y el wey se subió a la taza para asomarse y verme. Sí era quien yo pensaba: un señor moreno muy alto, como de rancho, pero demasiado moreno, como con ancestros de origen africano. Negro pues, el don. Ya me he dado unos fajes muy ricos con él. Al parecer me reconoció. Me sujetó de la playera y me la empezó a levantar, para indicarme que me desnudara. Me subí la playera para que viera mi torso lampiño y desnudo. Me acarició y me agarró mis chichitas, me las apretó y luego se bajó de la taza. Pensé que iba a salir para meterse a mi cubículo, pero sonó la puerta de entrada de los baños un par de veces y mejor se fue el señor.

    Ya no se pudo hacer nada más porque entró el señor del aseo. Así que decidí salir para ir al otro baño. En cuanto salí, iba entrando un chavo de unos 28 a 30 años, alto, de cuerpo atlético, moreno, con playera negra ajustada, pero tenia un logotipo de arcoíris en la playera. Más evidente no podía ser de que era gay. Nos miramos un instante, pero él entró al baño y yo ya estaba afuera. Pensé en volver a entrar, pero me iba a ver demasiado obvio con el señor del aseo que me acababa de ver salir.

    Atendí mi asunto al que iba. Al terminar me pasé a los baños del lado del puente, pero ya estaba el señor del aseo ahí. “¡Mierdaaaa!” pensé. Ya no pude hacer nada y hasta el día de hoy no me he deslechado, con las ganas acumuladas desde ese día.

    #118736
    hefraperez
    Participante
    Puntos: 603

    Ayer viernes 06-ago salí muy temprano a llevar a una persona a ponerse la vacuna covid. Eran las 6 am, estaba oscuro y con ligera lluvia en toda la ciudad. Me dio algo de morbo el saber si a esa hora y con ese clima habría cruising en algún lugar. Pensé en los baños de la consti, en los alrededores del parque la Pona… Al final me decidí por la central camionera.

    Fui y entré a los baños junto al puente peatonal, a eso de las 7 am. Para mi sorpresa estaban los 3 últimos cubículos ocupados a esa hora y se notaba que todos buscaban faje. En ese momento salió el del baño del fondo. Era un chavo delgado, moreno claro, como de unos 25 a 27 años. Se notaba que era pasivo. Yo estaba sentado en la bardita junto a los cubículos y al pasar se me quedó mirando directamente al paquete. Se notaba que estaba hambrientísimo de verga.

    Me dirigí al cubículo del fondo y antes de entrar me regresé y lo miré un momento a través del espejo, como para darle a entender que se acercara a mi cubículo. No vino, así que entré y cerré la puerta. Estaba el agujerito para espiar al de al lado descubierto y por las sombras del piso vi que el vecino se puso a espiarme en cuanto me bajé el pantalón, así que me la jalé estando de pie, para que me viera y me hiciera señas para fajar.

    No me hizo señas, pero me agaché un poco sin que se diera cuenta y lo vi con las piernas abiertas masturbándose muy rico. No supe si era joven o un señor, pero tenía unas piernas morenas lampiñas bien macizas, tal vez por su complexión o en algún momento fue al gym o jugó fútbol. Me excitó mucho verlo darse placer y abrir esas piernotas.

    Salió el wey del tercer cubículo y se acercó al mío, se quedó espiándome por entre la puerta, así que me puse de pie, con la verga de fuera y le abrí. Era un wey alto, como de 30 años, delgado. Iba con cubrebocas y se me quedó viendo. Le agarré la verga por encima del pantalón, ya la tenía medio parada, pero no hizo nada y se fue a los lavabos. Volví a cerrar y a sentarme a jalármela.

    Me agaché de nuevo para ver al piernudote de al lado. Seguía jalándosela, con las piernas muy abiertas, así que me arriesgué y pasé mi mano para acariciarle la pierna y hacerle señas para que me dejara masturbarlo. No respondió. Me agaché junto a la taza para que me viera el culito y me tocara, volví a hacerle señas y nada.

    Me molesté un poco, pero seguía muy excitado, así que me masturbé hasta deslecharme yo solo. Al terminar, el vato de al lado salió, y entró en su lugar el chavo que se me quedó mirando al principio, el que parecía pasivo. Yo ya me había deslechado y se me había ido el líbido, además me puse nervioso de que el vato al que le agarré la pierna fuera a delatarme con los vigilantes. Mejor me fui a lavar las manos.

    En eso entró un señor al baño del fondo, pero a hacer sus necesidades. Yo me fui de ahí y al pasar por una calle cercana vi al chavo pasivo. Salió casi igual que yo. No tuvo éxito. Ni modo. Aun así, se ve que es buen horario para hacer de todo, antes de las 8 am. Están limpios los baños y no hay intendentes que se metan a vigilar. Aprovéchenlos.

    #120880
    hefraperez
    Participante
    Puntos: 603

    El pasado domingo 29-ago tuve que ir por una urgencia a comprar un boleto de camión a la central camionera (por cierto ni hubo boletos a la hora que quería). Así que aproveché para ir a los baños. Eran más o menos las 8:30 de la noche. La central estaba tranquila y con poca gente.

    Entré a los de 5ª Avenida. Estaban solos, a excepción del penúltimo cubículo, así que me metí al último. Estaba descubierto el agujerito para espiar, aunque al tratar de fijarme con discreción, el de al lado parecía no estar haciendo nada, así que me puse de pie, me bajé el pantalón y me empecé a masturbar.

    Me volví a asomar y ahora sí pude ver que el vato se la estaba jalando. Era un chacal moreno, flaco. No le vi la cara, no supe si era joven o viejo, pero por su ropa le calculo unos 30 años. Pasé mi mano por debajo para que me dejara jalársela, pero no me hizo caso, se siguió masturbando él solo. Como sólo estábamos nosotros dos, primero me agaché un poco para que me la agarrara el culo o la verga, pero no lo hizo. Luego me agaché más, mostrándole mis nalgotas por debajo, pero me volvió a ignorar.

    Entonces me hinqué, ya con el pito bien parado y ahora sí me empezó a masturbar, se sentía su mano un poco tosca y rasposa, luego el wey me sobaba el glande con un dedo. Yo ya estaba lubricando y el wey me frotaba la babita de la verga en todo mi glande. Eso me excitó mucho, pero tuve que hacer pausas y levantarme para no venirme.

    Al levantarme, le hacía señas para que él se hincara, pero no quiso. Siguió sentado, masturbándose. Pude verle su verga, muy morena y con el glande color café. Volví a hincarme varias veces para que me masturbara, pero yo quería más, así que después de aguantar la eyaculación varias veces, ya no pude resistir y me levanté para venirme en la taza. Me limpié y me retiré. El wey siguió ahí. Los baños se quedaron solos, se ve que es buen momento los domingos en la noche para ir.

Viendo 20 entradas - de la 1 a la 20 (de un total de 20)
  • Debes estar registrado para responder a este debate.